Charlotte (2015)

     De nuevo me cambia la vida y me asaltó la nostalgia remember, así que me pareció un buen momento para recuperar Charlotte (2105), una historia que ya sabía que no me defraudaría.

     "Yuu Otosaka tiene un poder peculiar: puede poseer a otros durante unos segundos. Y ha decidido vivir su vida ocultándolo y sacando buen provecho de ello. 

     Pero un día es descubierto por Nao Tomori, quien le informa de que no es el único y de que si sigue usando su poder indiscriminadamente, su vida puede correr peligro. 

     Para mantenerlo vigilado, Yuu es obligado a transferirse a otra escuela junto con su hermana pequeña, y pasa a formar parte del Consejo Estudiantil presidido por Tomori, un grupo especial que se dedica a buscar jóvenes con poderes como ellos para convencerles de que dejen de usarlos."

     Me ha sorprendido que este anime fuera una idea original creada para serie de animación, no procedente de ningún manga o novela. Sinceramente debido a su complejidad, creía que sería una novela ligera, pero no. Quizá por eso resulta tan peculiar en muchos sentidos.

     El ritmo es raro. Al principio parece una comedia romántica ambientada en la vida escolar con toques sobrenaturales. De repente, se vuelve seria y el protagonista, que había empezado a suavizar su cinismo, cae en un pozo de desesperación y se vuelve amargo y oscuro. Pero apenas por un episodio o dos. Entonces el ambiente se relaja de nuevo aunque ya no es lo de antes: vienen los flashbacks y los pasados olvidados, ya no hay tanta despreocupación y la comedia va desapareciendo. Todo se torna serio y un poco cruel, el prota va pasando por todo tipo de estados precipitadamente: de confiado a cobarde, de egoísta a héroe desinteresado. Hasta que por fin llegamos a un final semi feliz y salvado por los pelos.

     Aún así, me encanta esta historia. El número de chicas y chicos es casi equilibrado. La evolución del protagonista es compleja y creíble (aunque los demás apenas se desarrollan ni cambian). La historia de amor también aparece de forma gradual y más madura de la que estamos acostumbrados. Tiene su "poco de todo" que tanto me gusta: comedia, drama, emoción, intriga, acción, amor, poderes sobrenaturales, situaciones de auténtico peligro, y gran ausencia de bragas y pechos grandes.

     Una de las pocas series cortas y autoconclusivas que existen y que merece la pena ver. Una vez como mínimo.