miércoles, 28 de agosto de 2019

Houseki no Kuni (2017)

     Me vine arriba con el CGI y pensé que había llegado el momento de la tan postergada por mi parte Houseki no Kuni (2017), serie que pasó bastante desapercibida en su momento, y sin embargo, era muy alabada en los blogs undergrounds.
     "Phos es la gema más frágil y torpe de sus hermanas y por ello no puede luchar contra los lunarios que tratan de secuestrarlas todos los días. El maestro Kongo le encarga la confección de una enciclopedia para que se sienta útil, lo que la llevará por un camino de aventura, descubrimiento y transformación totalmente inesperado."

     Tal vez no debí verla justo después de Seikai suru Kado, ya que elevó mi estado de ánimo hacia unas expectativas para las que Houseki no kuni no estaba diseñada. El desarrollo se me antojó lento y demasiado contemplativo, como si no tuviera una dirección concreta hacia la que avanzar, y el final me defraudó, me sentí engañada y me terminé de enfurruñar.
     Sin embargo, ahora que ha pasado algo de tiempo y la recuerdo en perspectiva he de reconocer que no carece de méritos, solo que yo no estaba en el mejor momento para percibirlos. Eso fue todo.

     La historia es muy buena, y original como pocas. Presenta un mundo en principio mágico donde las gemas han tomado formas humanoides y según sus constituciones están encargadas de la defensa y cuidados de su pequeña comunidad, amenazada constantemente por los misteriosos lunarios, y guiada por un monje sabio y poderoso que, cuando no está dormido, las protege luchando a su vez.
     Lo que pasa es que al principio no pasa nada. Es una especie de "recuentos" y durante varios capítulos solo vemos a la/el protagonista recorriendo diferentes espacios, presentándonos así poco a poco a los demás personajes e introduciéndonos en su mundo. Un mundo tranquilo y bello, donde predomina la naturaleza y toda clase de pequeñas criaturas, hasta que aparecen procedentes del cielo los inefables lunarios, de formas cambiantes pero con un único objetivo: secuestrar a las gemas. Y entonces entablan batallas épicas donde la animación estalla y llena la pantalla de movimientos y coreografías increíbles, creando escenas maravillosas en detalle y flexibilidad, por otro lado super crueles pero nunca faltas de elegancia.
     A ver, las gemas no mueren, ni sangran, pero se parten, se fragmentan, pierden miembros, a veces estallan en pedazos, a cámara lenta para más inri, lo cual da bastante cosita, pero todo lo ponen taaaaaan bonito...

     Y así a lo tonto, Phos (ni hombre ni mujer sino todo lo contrario) empieza una búsqueda para sentirse útil y para ayudar a su amiga Cinabrio. Va dando tumbos de aquí para allá, metiéndose en líos continuamente y perdiendo partes de su cuerpo cada dos por tres. Y aunque parece que no avanzamos nada, sin darte cuenta se empiezan a plantear cosas que se daban por sentado y de repente sospechas que no deberían serlo tanto. La/el prota se descubre de pronto preguntándose por "la verdad", la verdad de su creación, de su mundo y de todo lo demás. Y ahí cuando más intrigada estaba, ¡zasca! se acaba la serie dejándome con un palmo de narices.
     Y no, no era el momento de toparme con un "final" así. Algunos por ahí la han comparado con Made in abyss y la verdad yo también le veo similitudes, en cuanto a calidad de animación, belleza de paisajes, mundos misteriosos, y finales demasiado abiertos. No me vale que me digan que el manga sigue en publicación y blablabla. Una serie anime es un producto diferente, y como tal, debería tener su comienzo y su final, o cierre o lo que sea, pero una conclusión. Para mí sigue siendo la mitad de la nota. Y aquí suspenden por goleada. Por lo demás, es perfecta.

domingo, 18 de agosto de 2019

Seikai Suru Kado (2017)

     Tanteando mis carpetas a ver cuál sería la siguiente serie que vería, abrí sin pensarlo mucho el primer capítulo de Seikai Suru Kado (2017) porque me intrigaba la imagen donde se ve a una especie de príncipe de otro mundo rodeado de enchaquetados. Y ya no la pude soltar.







     "Un enorme y misterioso cubo aparece de repente sobre el cielo del aeropuerto de Haneda y toma tierra, atrapando dentro de él a un avión con sus 252 pasajeros. El cubo pertenece a un misterioso ser llamado Yaha-kui zaShunina, quien dice venir de un universo diferente con intención de ayudar a la humanidad. Su portavoz no es otro sino Kojiro Shindo, el mejor negociador del Gobierno japonés que casualmente se encontraba en el avión atrapado dentro del cubo."




     Otra de las cosas que me intrigaban de esta serie era el propio título. Seikai Suru Kado significa Kado: la respuesta correcta. Así que debía de haber alguna pregunta en alguna parte. Lo que sí pude adivinar es que iría de cosas diplomáticas y negociaciones, aunque no a qué nivel ni entre qué dos partes. A lo largo de sus 12 capítulos me tuvo pegada a la pantalla con cara de idiota esperando por más.
     Probablemente no sea el planteamiento más original que pueda encontrase, pero a mí me ha sorprendido bastante. Puede recordar un poco a Ultimátum a la Tierra, pero zaShunina no es un extraterrestre ni trae una advertencia. Es un ser anisotrópico, que viene a decir algo así como que es de un universo diferente del nuestro, donde además de tiempo y espacio, tienen unas 37 dimensiones más. Y lo que trae son "regalos" para acelerar la evolución de la humanidad. Para él, sus regalos son buenos para el hombre y le traerán felicidad acercándolo al mundo anisotrópico, pero entiende que se desconfíe y de hecho les invita a pensar bien si los aceptarán o no, aunque en el fondo espera y desea que la humanidad acabe llegando a la respuesta correcta.

     Shindo, su portavoz humano, y Sakara Tsukai, la negociadora japonesa, son viejos conocidos y ambos destacan por sus enormes logros en negociaciones y conversaciones anteriores. Con frecuencia, los personajes discuten sobre la inexistencia de una única respuesta correcta. Cualquier conflicto de intereses suele tener más de una, así que el fin de toda negociación es darle a ambas partes lo que en realidad quieren más que lo que piden. Al menos así lo entendía yo.
     Sakara parece ser más emocional. A nivel personal no quiere los regalos de zaShunina. Cree que la humanidad debe seguir su propio ritmo y disfrutar de su universo tal como es. Shindo parece más racional y se muestra muy cercano a su "cliente", comprobando los riesgos y beneficios de dichos regalos a medida que van siendo revelados.
     zaShunina es un personaje único, o rara vez visto al menos que yo recuerde. Una especie de dios, dotado de gran poder y sabiduría, pero carente de experiencias humanas tal y como pueden ser las emociones, el afecto o la sorpresa. En su ignorancia e infinita curiosidad radica también gran parte de su encanto, pero como se ve venir poco a poco, también entraña un serio peligro con su inocente crueldad. Es un niño gigante con poder más que suficiente para borrar un universo y empezarlo de nuevo si no le gusta el color, y aunque te caiga bien, será mejor que no lo olvides.

     Además de sus protagonistas y secundarios, la serie es magnífica en la forma de tratar el asunto, globalizándolo desde el primer momento, a través de conversaciones públicas, medios de comunicación y redes sociales. Y el mundo responde como seguramente respondería si pasara de verdad. Pero a su vez, mantiene la intimidad e individualidad de las situaciones y relaciones entre sus protagonistas, haciendo que también te intereses por sus propias respuestas a la situación. Aunque sin duda la relación más interesante sea la de Shindo-zaShunina, evidentemente, una amistad extraña y tierna a la vez de la que depende el futuro de un planeta entero.
     Cuando finalmente llega el conflicto he de decir que zaShunina pierde demasiado pronto su integridad. Su personaje debería haber permanecido algo más frío, y no parecer un psicópata en pleno ataque de histeria. Con esa salida de tono, su tragedia pierde fuerza porque ya no empatizas tanto con él. Aún así, el desenlace es tremendo, lleno de sorpresas, algunas previsibles, otras salidas un poco de la nada, pero bueno, acabas aceptándolas, y la conclusión no desmerece toda la tensión que has llevado hasta ese momento.
     Aunque a mí, personalmente, me hubiera gustado algo menos triste, no estoy del todo descontenta con este final. Porque la serie es tan buena que el conjunto no pierde potencia aunque el final flojee. ¡Ah! Y está desarrollada en CG, cosa de la que te olvidas casi al minuto uno. Sigo sin ser muy fan de este tipo de animación, aunque reconozco que ha mejorada muchísimo, pero es que la calidad técnica me importa poco si el argumento me clava a la silla de esta forma.

     Recomendación sin duda.

martes, 13 de agosto de 2019

RobiHachi (2019)

     Como siempre visito las mismas cuatro páginas para estar al día de las series de temporada, con frecuencia se me pasan algunas de las menos populares, y que por un motivo u otro, podrían acabar interesándome. Así que repasé el Anime Chart de la pasada primavera, y una de las afortunadas fue RobiHachi (2019), que no pensé que la terminaría pero, oye, al final sí.





     "En el año 51 de la Nueva Era Galáctica, Robby Yarge intenta triunfar con algunos negocios rápidos pero no consigue más que perder a su novia y ser perseguido por los cobradores de deudas. Uno de estos cobradores resulta ser un joven llamado Hatchi Kita quien, por accidente, queda atrapado en la nave de Robby cuando éste logra huir de la Tierra.
  Tras algunas discusiones, Hatchi acaba uniéndose a Robby en su viaje hacia Isekandar: un legendario planeta donde todos encuentran la felicidad."




Por la calidad del diseño y animación, al principio pensé que estaba ante una producción china adaptada, pero nop: RobiHachi es una producción japonesa. Superada esta mala primera impresión, me dejé llevar poco a poco por el absurdo de su planteamiento y comencé a verle el sentido.
     Como dicen al final de su primer episodio, esta no es una serie de mechas (aunque tenga un robot gigante en ella). Es la historia de un viaje de dos desconocidos por una serie de planetas donde irán conociendo gentes y resolviendo pequeños conflictos, al tiempo que van conociéndose entre ellos y a sí mismos. Al principio es una huida. Tanto Robby como Hatchi están huyendo de sus pasados y sus responsabilidades, y emprenden la búsqueda de la felicidad representada por el planeta Isekandar, donde se cree que todos encuentran solución a sus problemas y ven cumplidos sus deseos.
     Sin embargo, el viaje en sí les ayuda a descubrir cosas de su pasado que no sabían. Y que muchas de las cosas que creían, en realidad no era ciertas. La mayor falacia, por supuesto, es el propio planeta Isekandar, pero para cuando llegan allí prácticamente ambos ya se han dado cuenta de que la felicidad no es algo que se pueda conseguir comprando un amuleto, y a su modo particular, aceptan la realidad y asumen sus responsabilidades.

     La ambientación futurista-espacial le da la oportunidad de expandirse en el absurdo de diseños y situaciones que, sin embargo, se basan en conceptos sociales y tradicionales. El género que predomina diría que es la comedia ligera, ya que ni roza temas graves ni desborda hilaridad. Todo se mantiene dentro de un tono de normalidad cotidiana. Su tono comedido (y ciertos cameos descarados) me trajeron a la memoria Binan Kōkō Chikyū Bōei-bu Love! Love!, serie que he visto pero no comentado porque... no sabía cómo describirla. Y es que comparten al mismo creativo.

     Desde luego no es un anime al uso y entiendo que no haya tenido mucha difusión. Es un tipo de humor muy japonés y podría resultar aburrido para el otaku medio. Pero tiene su rollito, y para echar la semana tranquilamente, a capítulo diario antes de irse a dormir, pues no está mal.

lunes, 12 de agosto de 2019

Radiant (2018) y (2019)

     Hace un par de semanas disfruté por fin de un fin de semana croqueta y decidí escoger un shonen con más de 12 capis que me entretuviera sin complicaciones, y así cayó Radiant (2018), de la que no tenía mucha info y, por tanto, ninguna expectativa.





     "Los némesis son unos monstruos que caen del cielo y atacan a la gente. Aquellos que sobreviven a su ataque, quedan malditos pero adquieren la capacidad de usar magia.
     Son los hechiceros, los únicos capaces de enfrentarse a los némesis y, sin embargo, son temidos y rechazados por la sociedad. Seth es un joven aprendiz que está decidido a encontrar la legendaria ciudad de Radiant y destruir así a todos los némesis."







     Pues eso, un shonen bastante típico con un protagonista adolescente de orígenes y pasado desconocidos que por supuesto posee un gran poder maldito que debe aprender a controlar antes de que se vea consumido por él. Aún así se notan ciertas divergencias, tanto en diseño como en los desarrollos habituales que suelen llevar este tipo de historias. El joven inicia un viaje sin que nadie muera traumáticamente, por ejemplo, y si bien es cierto que aparece la compañera femenina de rigor, no lo hace el compañero-amigo-rival con el que compartirá sus momentazos de heroicidad y progreso. Es aquí cuando me sorprende la noticia de que no está basado en un manga como yo creía, sino en un manfra o franga, horribles palabros que vienen a definir el "manga" hecho en Francia.
     Sí, señores, Radiant es un "manga" francés que ha conseguido publicarse en Japón y hasta tener su propia serie, producida por el mismísimo NHK, y que por lo que sé, hasta tendrá segunda temporada próximamente.

     Y es que no está nada mal. Tiene comedia, mucha, pero también momentos profundos, aunque a veces estén mal compensados u ocurran un poco de repente. Los personajes tienen personalidades fuertes, complejas y no están exentos de carisma. Seth es optimista e inocente, bastante botarate, pero eso lo hace adorable. Inicia un viaje para encontrar la ciudad legendaria donde supuestamente nacen los némesis y así acabar con el mal del mundo, pero también debe aprender, entrenar y mejorar, y quizá esa parte no esté tan lograda como en las series a las que los japos nos tienen acostumbrados. Al principio sobre todo eso debería ser el tema central, al llegar a la ciudad academia, por ejemplo, sin embargo se pierde un montón de tiempo en trabajos absurdos y no parece que progrese mucho.
     Hasta que llega el arco de Rumble Town. Entonces la cosa se pone seria y da la sensación de que se alarga hasta el infinito, dando mucha información de golpe y reservándose nuevos misterios. Pero engancha, claro que sí.
     La parte "contraria" a los hechiceros, son la Inquisición. No me quedó muy claro de dónde sacan ellos el poder mágico con el que se enfrentan a hechiceros y némesis, pero debe ser algo santo o sagrado en contraposición al poder hereje de los hechiceros. Y aquí también hay personajes interesantes que dan pinceladas de color a la ruidosa trama central, pero se desarrollan poco. Habrá que esperar a la segunda temporada, espero que no me decepcionen en este sentido.

     El lema central de todo este mundo es la discriminación y los prejuicios. El miedo y el rechazo injustificados a lo que es diferente, ya sean hechiceros, monstruos o inmigrantes. Y que tanto el bien como el mal están presentes en todas partes. Que hay inquisidores buenos como hay hechiceros malos. Y así, en todos los grupos de la sociedad. Se deja adivinar que Seth va a encontrarse en el futuro con muchas encrucijadas y decisiones difíciles, pero eso es lo que me mola: las fronteras diluidas y el proceso por el que cada uno llega a la construcción de sus propias convicciones.

     Una historia que no decepciona aunque tampoco sea la quinta maravilla. Deseando saber más de este muchacho.

EDIT 06/03/2022




     Pues hará un par de semanas que por fin me vi la segunda temporada: otros 21 capítulos que se emitieron de octubre de 2019 a febrero del 2020. Ambas producciones se hicieron casi al mismo tiempo, quizá fue cosa de la pandemia que se retrasara un poco, pero en cuanto a estilo, calidad y desarrollo no hay ninguna diferencia.
     Sí me pareció que esta parte tenía menos rellenos que la primera, y aunque un poco azarosa en cuanto a los eventos, el hilo conductor queda bastante más claro.
     Se revelan muchos detalles que quedaron pendientes en la primera entrega. Aparecen algunas incógnitas nuevas también, claro está, pero se cuentan muchas cosas sobre Seth y empezamos por fin a poder especular sobre sus orígenes.

     Un cambio radical, por cierto, sí aparece en cuanto a la madurez de los personajes protagonistas. Creo que al desaparecer los episodios de "relleno" y abundar las revelaciones y demás, las acciones y decisiones de Seth  evolucionan un poco en consecuencia. Por otro lado, el cambio en la personalidad de Melie, la compi femenina, me resulta poco creíble, poco fundamentado. A raíz de un enfado con Seth, explica sus motivos para querer avanzar y un poco de sus "traumas" pasados, y a partir de ahí se vuelve más centrada y responsable. Pero ya te digo, me pareció un poco metido todo con calzador. Como que la niña tenía que cambiar y lo justificamos así y ya.
     Aparecen personajes nuevos y viejos conocidos en ambos bandos, hay etapa de entrenamiento y peleítas a su debido tiempo. En ese sentido me parece bien desarrollada y equilibrada. Casi te olvidas que en origen no es manga como tal. De hecho sí apenas un par de detalles que delatan un poco las influencias de su origen occidental: el personaje de Boudica, y la trama del Bosque del Tiempo, que me recordaba así levemente a la del Bosque Viejo de "El Señor de los Anillos, esa donde salen Tom Bombadil y Baya de Oro.

     Y oye, que no está nada mal, que se deja ver estupendamente y no da muchos rodeos para alargar la cosa, que cierra más o menos arco pero te deja con intríngulis para que quieras saber más y que en definitiva es recomendable a varios niveles. Y ojalá nos traigan más cositas de ella, que me las vería encantada.