Mi último gran descubrimiento ha sido ACCA: 13-ku Kansatsu-ka (2017). No me atraían ni la sinopsis ni el diseño de personajes, pero consiguió atraparme desde el capítulo uno y no me di ni cuenta. Estas son las cosas que me gusta que me pasen.
"El reino de Dowa, compuesto por 13 estados, está a punto de celebrar el 99 cumpleaños de su primer rey sin que se haya formalizado el nombramiento del único heredero, su sobrino el príncipe Schwann, lo que crea cierto aire de intranquilidad política.
Para asegurar la estabilidad, al fundarse el reino se creó ACCA: una organización independiente que supervisa la situación en los diferentes estados. Jean Otus es el encargado de inspeccionar la situación personalmente, por lo que se ve obligado a realizar frecuentes viajes de rutina. Pero en sus últimas inspecciones ciertos acontecimientos en apariencia inocentes le acabarán implicando en una trama conspiratoria sobre un golpe de estado."
Un protagonista flemático, en apariencia impasible, fumador empedernido en un mundo donde el tabaco es oro, que lo único que quiere es que lo trasladen de su departamento para quedarse en casa con su hermana y comer pan todo el tiempo, poco a poco se ve metido en un berenjenal del que no solo no sabe nada, sino que al parecer le ha elegido como la pieza clave.
Su carácter casi imperturbable puede hacer parecer que no le importa lo que pasa o que lo tiene todo controlado, pero no es así. A medida que el embrollo se vuelve más peligroso, empieza a mostrar gestos de sorpresa, preocupación y miedo que lo devuelven al terreno de las personas normales. Aunque apenas se despeine...
Está rodeado de grandes personajes, sobre todo masculinos, cosa que yo siempre agradezco, y a pesar de que no falta la típica hermanita, no resulta pegote, sino que tiene una gran personalidad y hasta su propia trama. Por supuesto mi favorito es Nino, su incondicional amigo de la infancia y apoyo imprescindible.
Me encanta cómo se desenvuelve la historia, poco a poco, sin caer en trampas de misterios previsibles y secretos a voces, dando las pistas justas a tiempo para que cuando descubras algo, se cree un nuevo enigma. Una vueltecita y otra vueltecita, y cuando crees que sabes por donde va a ir, te da otro giro. Y un final sensato y nada peliculero, sin fuegos artificiales ni falta que le hace. Una historia que se desarrolla en las sombras y se resuelve del mismo modo, sin que tenga que venir Zeus a poner orden.
Es difícil seguir hablando de ella sin hacer spoilers, así que la recomiendo sin más.
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