Debido a ciertas circunstancias técnicas (tengo que llevar mi pc a reparar YA!!) a veces no tenía a mano mi disco duro externo y echaba mano del portátil, por lo que antes de terminar Basquash!, empecé a ver Fune wo amu (2016), aprovechando que estaba disponible en Amazon Prime Video.
"Mitsuya Majime es un introvertido amante de los libros que trabaja en el departamento de ventas de una editorial. Un día, es reclutado por la sección de diccionarios para que les ayude a completar el ambicioso proyecto en el que están trabajando.
En este pequeño departamento, Majime parece que por fin ha encontrado su lugar, pero la creación de un diccionario es una labor lenta y minuciosa no exenta de contratiempos."
Fune wo amu, también conocida como The great passage, aunque significa más bien "tejer un barco", se basa en una novela escrita por Shion Miura, que yo no sé quién es pero ha ganado algunos premios literarios y tiene un par de adaptaciones animadas de sus libros. O sea, que parece literatura seria, y como tal queda reflejado en la historia que nos trae al caso.
La calidad técnica es indiscutible, tanto de diseños, como de fotografía, animación y narrativa. Todo fluye suave y deliciosamente, como en un "recuentos", pero sin aburrir. Describe paisajes y ensueños pero sin detenerse en explicaciones tediosas, y se centra en las escenas que hacen avanzar la trama y a sus protagonistas.
Los personajes son complejos y solo se dejan conocer en determinadas facetas, no en todas, como si de personas reales se tratase. No llegamos a saberlo todo de ellos y tampoco importa: solo interesan las emociones y pensamientos que tienen relación con la trama principal y los cambios que se producen a raíz de estas relaciones y la superación de las dificultades. En este aspecto en realidad solo se distinguen dos de ellos, como son Majime (el prota) y Nishioka, la extraña pareja. El primero extremadamente serio e introvertido, con frecuencia incapaz de encontrar las palabras para expresar sus pensamientos. El segundo, un despreocupado charlatán experto en animar ambientes y negociaciones complicadas. Punto en común: ambos son buenas personas y de mente abierta, por lo que están dispuestos a aceptar e incluso aprender del otro. Majime ganará confianza en sí mismo, Nishioka aprenderá a confiar en los demás.
Otro punto fuerte bastante relevante en esta historia son las tramas románticas de cada uno de ellos, ya que aportan emoción y comicidad, y hacen más llevadera la trama de la creación del diccionario, que de por sí, no es algo que rebose acción a raudales, aunque no carece de interés, ciertamente. Y es que hacer un diccionario japonés es la leche, madre mía, empezando por su alfabeto y terminando por la enorme cantidad de significados que un solo vocablo puede tener en un momento determinado y a lo largo del tiempo. Y como tampoco hay una Real Academia ni organismos estatales similares, corre a cargo de las editoriales el crear uno, y si no es lucrativo, pues tampoco se hace. Y se llevan AÑOS para poder sacar uno. Algo que solo es posible en un país como Japón, me imagino.
La verdad es que entre tanta testosterona preadolescente, me vino muy bien intercalar este seinen relajado de sentimientos más maduros. Quizá fue la cara de cachorro asustado del prota lo que me hizo decidirme, o el hecho de que iba sobre libros y tal, pero me alegro mucho de haberle dado una oportunidad. Ojalá más series así.
P.D. Por cierto que hay una peli live action (2013), si acabo viéndola, volveré.
P.P.D. Pues ya la he visto.
Misma sinopsis, misma trama, y prácticamente mismo planteamiento. La versión live ni aporta ni se desvía del argumento que presenta la adaptación animada, aunque evidentemente, por motivos de formato y duración, resume o elimina algunas escenas.
Pero es prácticamente igual, aunque si algo he de resaltar es quizá que los personajes no poseen tantos matices y quedan algo más hieráticos.
A pesar de la enorme similitud, no la considero una pérdida de tiempo. Cuando un anime me gusta lo suficiente, me gusta verla también en su versión live action, y al ser ésta una historia tan real y mundana, ambas versiones resultan muy parecidas, y por tanto, me han gustado por igual cada cual en su estilo.
Pero tampoco es que recomiende verla si ya has visto la serie, eso ya, cada cual es cada uno.
Por cierto, el título en inglés (The great passage) hace referencia al nombre del diccionario, en japonés, Daitokai: "El gran pasaje", como un ticket o boleto que te permite viajar por el barco que cruza el inmenso mar de las palabras. Si es que estos japos son de un poético...
P.P.D. Pues ya la he visto.
Misma sinopsis, misma trama, y prácticamente mismo planteamiento. La versión live ni aporta ni se desvía del argumento que presenta la adaptación animada, aunque evidentemente, por motivos de formato y duración, resume o elimina algunas escenas.
Pero es prácticamente igual, aunque si algo he de resaltar es quizá que los personajes no poseen tantos matices y quedan algo más hieráticos.
A pesar de la enorme similitud, no la considero una pérdida de tiempo. Cuando un anime me gusta lo suficiente, me gusta verla también en su versión live action, y al ser ésta una historia tan real y mundana, ambas versiones resultan muy parecidas, y por tanto, me han gustado por igual cada cual en su estilo.
Pero tampoco es que recomiende verla si ya has visto la serie, eso ya, cada cual es cada uno.
Por cierto, el título en inglés (The great passage) hace referencia al nombre del diccionario, en japonés, Daitokai: "El gran pasaje", como un ticket o boleto que te permite viajar por el barco que cruza el inmenso mar de las palabras. Si es que estos japos son de un poético...
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